POEMA - Nada, de Sara Martínez - La Voz Silenciosa

NADA

Desfiguras mi pasado

entre cristales ausentes

Foto: Saramarfer

que reflejan desaires

a la paz soñadora eterna.

Inquietas el sutil duelo

de los que ya no regresan

entre quimeras de olvido

entre justicias deshechas.

Y explota la ira del pasado,

como anhelantes devoradores

de infancias y juventudes,

sedienta de gotas certeras.

Nada volverá a su sitio,

nunca regresarán bondades

ni miradas sinceras,

todo quedará en el oscuro suelo

entre añicos de absurdas penas.

VIAJE ETERNO

Foto: SaraMarFer

Parece como un chasquido
astillando hasta el tuétano
haciendo un roto opaco
a esta calma desdichada
ausente de tanto buscar.

Intento enfriar las lágrimas
que refrescan el dolor blanco
de este oscuro camino
zancadilleando este triste final.

Y la mente estorba el suspiro
como enseñando los dientes
a las verdades del tiempo
y el secreto de respirar.

La espalda doblega el minuto
escapando al presente
para ojear el segundo
donde se encierra el último mirar.

Parece como un viaje eterno
en ese tren que se pierde
esperando sentado el deseo
con la esperanza de despertar.

De nada servirá tanto hueco
de nada valdrá un anhelar más,
el tiempo tornará al presente
el paso volverá a su pisada
y mi retina te volverá a soñar.

ENTRE PASOS DE TINIEBLAS

Son tus pasos entre las piedras
que acarician el camino cierto
opuesto a tantas mareas

Foto: Saramarfer

que la vida mece en la ribera.

Es el canto de las sirenas
que hacen eco en las estrellas
entre esos mismos luceros
contra esas mismas promesas.

Haces dibujos de colores
en la marchita calma de la arena
cincelando las lágrimas de sol
para cobijar el retiro de la pena.

Son tus pasos alambiques de luz
entre tanto canto que rueda,
brotando el sonido que al despertar
me besa la mañana entre tinieblas.

Zarpas que matan, de Sara Martínez

ZARPAS QUE MATAN

FOTO: Saramarfer

Entorpece el cielo la mirada gris
que alerta del tiempo que pasa
como las nubes borrosas de agua
que esculpen penas eternas del alma.

La vida se enturbia con tu cara
como el bruno recuerdo ingrato
que atesora la zarpa que suprime y mata
para blindar un dolor eterno en calma.

Se pierde el miedo a la noche oscura
deshaciendo tus palabras en rima de plata
que versan cada una de tus farsas
reposando el silencio que acompaña y sacia.

Y me engancho al balcón azul del ocaso
para saltar hasta la última rama que aguarda
donde huir de tanto dolor certero,
que envenena horas y rastros,
que amarga la última luz de mis entrañas.

Callejeando por tu piel, de Sara Martínez

CALLEJEANDO POR TU PIEL

Foto: Saramarfer

Llega el viento en alfombra
con tus besos de amapola
que esculpen mis sueños
para amparar mi verdad.

Y te busco entonces
entre calles de gente
que esperan entre adoquines
alguna mirada que apreciar.

Y así descuido el rumbo
revolviendo el paso al frente
para llevarme rápido
a tus pisada llenita de azahar.

Llega la fragancia de tu brisa
como la gota mañanera
que refresca todos los andares
que imagino en tu mirar.

Te recorro entre senderos
para llevarme donde quieras,
que es lo único que aprieta
esta imaginaria
vida que contar.

Estrellas de madrugada, de Sara Martínez

ESTRELLAS DE MADRUGADA

Foto:Saramarfer

Hay madrugadas que son de viento
con el murmullo de la aurora
que sabe a chisme incierto.

Hay mañanas que son de nubes
como tapiocas que brotan
para amasar los recelos.

Hay días chirriantes de pisadas
entre las prisas de tanto atropello
que escupen descaro al mismo firmamento.

Hay noches que son destrelladas
con su bóveda como mortaja
para vestir cualquier ensoñamiento.

Pero hay madrugadas...¡ay, esas...!!
las que murmullan tu nombre en verso,
que amanecen desde dentro,
con el aroma de tus pasos
en todos los luceros del cielo.

Ósculos de ausencia, de Sara Martínez

Letras pequeñas para llevar, de Sara Martínez

ÓSCULOS DE AUSENCIA

Foto: SaraMarfer

Eres la ausencia sin retorno

la que busca los recodos,
entre caminos y estorbos
la esfinge de tu calma.

Eres la palabra silenciada
por cabellos estremecidos
de épocas grises y opacas
que bisbisea en las entrañas.

Y con ello espero en la nada
para volver a esculpir
tus miles de caras
que saben a ósculos fríos
entre las caricias del alba.

Pero sigues siendo un tiempo
entre minutos de aguja larga,
con brotes de infierno triste
que emborronan tu marcha.

LETRAS PEQUEÑAS PARA LLEVAR

Foto:Alicia Guarner

Abandonan las letras pequeñas,
que juegan en verso en rima
que saben de infancia pasada.

Son los ojos ausentes de niñez
que ciegan este tiempo tardío
entre nostalgias de sueños y calma.

En las manitas quedan las flores
como campanillas de tardes al sol
que saben a roce de tierra y calor.

Se escabulle el llanto inocente
ausente de miedos y rencores
en súplica de una caricia mejor.

Son los pasitos pequeños
los que suenan a redoble
buscando a mamá en una voz.

Pero parte el tiempo que nos queda
a galope de recuerdos por llevar,
como el viento que empuja el camino
como la vida que nunca quiere esperar.

Lazos en el viento de Sara Martínez en La Voz Silenciosa.net

LAZOS EN EL VIENTO

Desliza el olor de aire
entre piel de viejos recuerdos
que acechan en mi alma ajada.

Foto: SaraMarFer

Parece venir el susurro
que esculpe el vello canoso
acunando la caricia de olvido
en la espalda de tu enojo.

Miro las nubes nodrizas
que llevan algodones de tiempo
meciendo este arcaico día
hasta el crepúsculo incierto.

Espero la pisada hambrienta
de verde hierba fresca
brotando lágrimas aciagas
en esta exuberante tierra.

Resbala mi cabeza en tu hombro
entre lazos eternos de cabello ceñido
para amarrarme al soplo de tu viento.

Extraordinario instante, de Sara Martínez

En la senda de tu mañana, de Sara Martínez

EXTRAORDINARIO INSTANTE

Foto:Saramarfer

Es el momento extraordinario
desde lo común del tiempo
con el mirar tan habitual.

Es la huella de tu carmín
hablando entre la brisa
que esculpe un cantar.

Es el frágil roce de tu piel
que enhebra la exhalación
avivando este lento amar.

Es la palabra que idolatra
a tu esfinge turbia de ayer
recorriendo el eco de un pasar.

Es el instante de recordar
entre llovizna de noches oscuras
y la estrella que sabe atormentar.

Es el momento tan extraordinario
que los miedos agonizantes
se cubren entre sombreros
de soledad.

EN LA SENDA DE TU MAÑANA

Era tiempo de flores en las nubes

Foto: Saramarfer

entre guirnaldas de lluvia y aguacero
con plegarias de truenos y silencios.

Era el instante decisivo
donde los dedos resbalaban
entre labios besando el hambre de sueños.

Era el camino ardiente y oscuro
con zancadas de miedo y cuero
para atravesarlo solo y corriendo.

Era la respiración tuya y mía
como pegada en un aliento de invierno
para no olvidar tu aroma de viento.

Era el eterno tiempo que acompaña,
que siempre estremece el sendero,
para escaparte de nuevo en mi desconsuelo.

Llanto de tiempo, de Sara Martínez

LLANTO DE TIEMPO

Foto: Saramarfer

Vuelves como punzón de hielo
para romper el hilo racional
de tanto viejo tiempo.

Doblegas la apariencia
entre vendas de ojos
que ocultaban sufrimiento.

Me olvido de mis palabras
que encerraban silencios
para detener tanto lamento.

Y atrapas con furia
este pobre espíritu agotado
entre calvarios de duelo.

Mientras tanto, escribo
o transcribo pasados
que torturan posibles sueño.

Me queda acunar el llanto
que canturrea en el pecho
para dormir este daño.

Me oculto del día
entre luces negras de tul
para acabar con sigilo
este arruinado pretérito.

SUEÑOS DE CUADRÁNTIDAS

Foto: Saramarfer

Fluye el manto blanco
como niebla de verano
entre pisadas de escarcha.

Parece el canto que susurra
que acelera la mirada,
entre búsquedas plateadas.

Retengo el ímpetu esbelto
entre abrazos que callan
olvidando el tiempo
entre espacios de calma.

Parece un amanecer incierto
atesorando perennes estrellas
que partirán en el alba.

Fluye mi delirio cotidiano
como quien arranca guijarros
entre cuadrántidas desterradas..